Malestar entre socios de la SGAE: los nuevos estatutos chocan con la ley aprobada por Sánchez

Así lo advierten al menos socios de la SGAE, que tienen que votar en la Asamblea del próximo 24 de junio. Según el artículo 50 de la propuesta de nuevos estatutos que aprobó la SGAE a primeros de junio, y que debe ser ratificada por todos los socios en la citada Asamblea, podrán entrar en la Junta Directiva de la entidad «los socios que siendo administradores de repertorios de estos organismos hayan desarrollado previamente a la administración de dichos repertorios una actividad editorial independiente de, al menos, 5 años».

Esto abre la puerta a que las multinacionales, que fueron expulsadas por la anterior dirección de la SGAE por ser juez y parte en el reparto de los fondos, vuelvan al órgano de Gobierno de la entidad. También podrían entrar las editoriales de las televisiones.

Y eso es precisamente lo que prohíbe el artículo 159 apartado ‘ñ’ de la nueva Ley de Propiedad Intelectual (LPI) aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez.  Ese apartado señala expresamente que los nuevos estatutos de la SGAE deben velar porque los «titulares de derechos que pertenezcan a empresas usuarias no ocupen puestos en los órganos de gobierno y no participen en las tomas de decisión en que pudiera existir un conflicto de interés», como se ve en la imagen.

Por lo tanto, las fuentes jurídicas consultadas por este diario aseguran que los estatutos propuestos por Pilar Jurado chocarían con la ley. Fuentes de la SGAE no comparten esta interpretación de la norma y explican que «los nuevos estatutos determinan que este colectivo de socios no pueden ser elegidos como miembros del Consejo de Dirección, ser Vicepresidentes de su colegio, ni representar más del 25% del número de representantes de su colegio».

«Además de estas restricciones -continúan estas fuentes- y para garantizar una gestión libre de influencias de los usuarios de su repertorio y de limitación de acceso a los órganos de gobierno, se determina igualmente que deben ausentarse de las sesiones en las que se traten asuntos relacionados con tarifas y contratos. Con esta serie de medidas incluidas en los nuevos estatutos se garantiza una gestión libre de influencias de los usuarios del repertorio, tal y como se establece en la LPI», explican.
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Ausentarse de las reuniones

En efecto, como se ve en la imagen, el artículo 50 de los nuevos estatutos de la SGAE sí especifica que las editoriales que entren en la Junta Directiva no podrán entrar en el Consejo de Dirección de la entidad y, además, tendrán que ausentarse de las deliberaciones sobre el reparto de los fondos para no entrar en conflicto de interés.

Por lo tanto, la polémica está servida y, aunque finalmente se aprueben en la Asamblea del día 24, podrían ser impugnados y acabar en los tribunales. Sobre todo porque tiene que darles el visto bueno definitivo el ministro de Cultura, José Guirao. Guirao sufrió este martes un golpe al rechazar la Audiencia Nacional la intervención cautelar de la SGAE.

Cena 

Además de los nuevos estatutos, entre los socios de la SGAE no ha sentado bien la decisión de Pilar Jurado de invitar este miércoles a una cena a los socios que lo deseen para debatir con ellos personalmente las dudas que tengan de cara a esa Asamblea.